Kiosko y Más

La Graciosa, la primera región inmune

La pequeña isla canaria será pionera en España en estar cien por cien vacunada contra el Covid, al tener su población mayor de 16 años la pauta completa el 4 de julio

LAURA BAUTISTA

Mientras en el conjunto de España aún habrá que esperar meses, los habitantes de la pequeña isla canaria de La Graciosa serán los primeros en saber lo que es estar totalmente inmunizados frente al Covid-19. Está previsto que toda su población mayor de 16 años tenga la pauta completa de vacunación para el próximo 4 de julio.

En este momento, la denominada como ‘octava isla’, dependiente sanitariamente de Lanzarote, tiene a toda su población mayor de 30 años inmunizada con la pauta completa. La semana pasada recibió la autorización oficial para comenzar la inoculación de todos los residentes mayores de 16 años, que ya cuentan todos con una inyección.

De acuerdo a los plazos, la segunda dosis para este grupo etario con fecha de nacimiento en 2005 se suministrará los primeros días de julio, de forma que el día 4 la isla estará definitivamente libre de Covid.

A la espera de la decisión de qué ocurrirá con los menores de 16 años, la isla toma rumbo a ser un destino seguro. Que el plan de vacunación haya pisado el acelerador se debe a «una cuestión circunstancial» ya que tras vacunar a los mayores de 30, siguiendo el calendario, se optó por aprovechar los viales excedentes para ser administrados a las 150 personas, de entre 16 y 30, que faltaban.

Esta segunda dosis, la única que queda y apenas 150 viales, «está asegurada» con la previsión de que llegue en unas dos semanas y, por tanto, el reto de tener a toda la población inmunizada frente al Covid-19 está cada vez más cerca.

La Graciosa, con 29 km² y la isla menos poblada de Canarias, cuenta con una población de en torno a 750 personas, que se distribuyen en dos únicos pueblos: Caleta del Sebo (capital insular) y Pedro Barba. Según ha asegurado la concejala delegada de La Graciosa, Alicia Páez, podrá alcanzar su objetivo.

Alta aceptación

También lo ha explicado la directora insular de Sanidad, Noelia Umpiérrez. Es «una población pequeña» por lo que tras recibir el visto bueno de las autoridades sanitarias se procedió a avanzar en la vacunación como en ningún punto de España. Se ha administrado Pfizer.

Los residentes de La Graciosa están «contentos de recibir la vacuna y muy predispuestos» con un nivel de aceptación «muy alto ente la población», dijo. A excepción de alguna causa médica «todos han querido y han acudido a vacunarse», aseguró Umpiérrez.

La vacunación la lleva a cabo el equipo de enfermería del consultorio de La Graciosa, que tiene únicamente un enfermero, además de un médico. Los viales llegan a Lanzarote, y desde la isla hermana se distribuyen a las diferentes áreas básicas de salud, como es La Graciosa.

«Vivimos este proceso con ilusión. Hace un año que salimos del confinamiento y también esta isla iba un paso por delante en ese momento», contó Miguel Páez, animador cultural en La Graciosa, a Cope. Unos avances que también son positivos para la reactivación turística, ya que a la isla llegan unos 25.000 visitantes anuales.

Atrás la máxima alerta

La inmunización tampoco tardará en llegar a Lanzarote. Se estima que el 11 de julio toda la población diana de la isla tenga administrada al menos una dosis de la vacuna, mientras que a principios de agosto se espera que alcancen la pauta completa. Lejos queda ya el momento en el que la isla de Lanzarote y La Graciosa se convirtieron en el punto más preocupante de Canarias por su incidencia. Debido a su pequeño tamaño y su reducida población, La Graciosa registró en fin de año un brote en una fiesta, con 4 o 5 casos, suficientes para poner a la isla en tensión. Los datos de la vecina Lanzarote eran drásticos, lo que llevó a ambas localidades al máximo nivel de alerta decretado hasta el momento en el archipiélago, el nivel 4. Lanzarote se vio obligada en ese momento a derivar pacientes Covid a los hospitales de Gran Canaria. La Graciosa es lugar habitual de celebración de fin de año. Esta tradición provoca que cada año la población de La Graciosa se triplique por apenas unos días, lo que fue, entre otras, una de las causas de que desde enero hasta marzo ambas islas tuvieran que asumir algunas de las medidas más restrictivas del Estado, con el cierre de la actividad económica no esencial a las 18 horas y reuniones de un máximo de dos personas.

SOCIEDAD

es-es

2021-06-20T07:00:00.0000000Z

2021-06-20T07:00:00.0000000Z

https://lectura.kioskoymas.com/article/282364042636286

Vocento