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La arriesgada apuesta de Ancelotti

►Los resultados dan la razón a un técnico que lo fía todo a un once fijo y que apenas mueve el banquillo del Madrid, pero hay signos de cansancio en jugadores de peso

RUBÉN CAÑIZARES MADRID

Cerca del ecuador de la Liga, el Real Madrid mira por el retrovisor al resto de candidatos al título. Y los mira con bastantes metros de distancia. Siete puntos sobre el Atlético, ocho más que el Sevilla y trece respecto al Barcelona (los tres con un partido menos). La ventaja empieza a ser importante, sobre todo si tenemos en cuenta que el campeonato se ha igualado notablemente en las últimas temporadas, signo de que cualquier escapada será complicada de neutralizar, más aún si el que toma la delantera es un equipo acostumbrado a no dar segundas oportunidades, como es el Real Madrid. Otra cosa es la sensación que han transmitido los de An

Reparto de minutos en el Real Madrid

Temporada 2021/22 celotti en estos últimos diez días.

El equipo blanco suma cuatro victorias consecutivas (tres en Liga y una en Champions) tras el último parón de selecciones. Triunfos en los que ha mostrado momentos de gran juego y ha hecho disfrutar a sus aficionados, pero también se han visto vacíos que no pueden pasarse por alto. La inercia de un equipo como el Madrid le lleva en algunas ocasiones a ganar partidos que sobre el verde quizá no lo merezca, pero el peso de su calidad individual y su infranqueable gen competitivo no tiene parangón, ni en España ni en Europa. El triunfo del miércoles ante el Athletic evidencia que, incluso jugando mal y siendo superado por el rival, al Madrid es muy complicado meterle mano. Es el mejor equipo de la Liga, de largo, en las dos áreas, pero que los árboles no le impidan ver el bosque a Ancelotti. Hay motivos para darle una vuelta y tomarse en serio el asunto de las rotaciones que tanta alergia le producen.

«Es una virtud del equipo el saber jugar y sufrir cuando no es capaz de jugar al fútbol como quiere. Hay otros que cuando pasa esto bajan los brazos, pero el Madrid tiene un carácter muy fuerte y un compromiso muy grande», explicaba Carletto tras la sufrida victoria ante el Athletic. Análisis certero, pero seguramente insuficiente. Los de Marcelino llevan una temporada ciega en ataque, y no todos los rivales contra los que se enfrente el Madrid van a jugar siempre con una venda en los ojos. Ancelotti se ha empeñado en no rotar a su plantilla y, además, ejecuta los cambios cuando los encuentros están ya bastante avanzados. El italiano quería que su Madrid tuviera identidad, y para él eso conlleva saberse el once de memoria, algo que ha logrado. Isco, Marcelo, Hazard, Bale, Mariano o Jovic no existen. Lo que es una incógnita es el precio a pagar por esta exigencia otoñal.

«El equipo ha terminado cansado, pero es normal cuando juegas contra un rival más fresco –tuvo dos días más de descanso–», reflexionaba Ancelotti, que cree más en los cinco cambios disponibles durante el partido, e introducir energía y vigor cuando al equipo le empiezan a pesar las piernas, que en agitar el once inicial. Cierto es que tiene en sus manos el comodín de Pintus, cuya vuelta al Madrid ha aminorado considerablemente el número de lesionados y ha potenciado la preparación física del equipo, pero los antecedentes muestran que los meses de abril y mayo se pueden hacer bastante largos.

Síntomas de agotamiento

Hay jugadores, como Casemiro, Modric Vinicius o Benzema, que transmiten ya cierto agotamiento y falta de frescura. No tienen la chispa de hace un mes, pero eso no quiere decir que estén haciendo bulto. Son tan buenos que siguen decidiendo y ganando partidos, pero si no se les da un respiro las probabilidades de ‘explotar’ son más elevadas. De momento, Ancelotti no le da relevancia a este asunto, aunque admita que el calendario es muy exigente. El italiano entiende que hay ligas que se pueden dejar encarriladas en otoño, y ese es su objetivo porque, además, no tiene en su mente el medio ni el largo plazo. Va partido a partido y lo que pase en primavera no le interesa, como él mismo ha reconocido ya en varias ocasiones.

Al técnico le es indiferente que su once de cabecera, más Lucas, Asensio, Valverde y Nacho (suplentes más utilizados), acumule el doble y el triple de minutos que el resto de jugadores de la plantilla. Pero Zidane actuó así la pasada temporada y acabó muriendo en la orilla. Ancelotti también lo hizo en su segunda campaña en el Madrid (2014-2015) durante su primera etapa en el banquillo, y el equipo lo pagó desde enero, terminando en blanco. A Carletto este pasado le da igual. De momento, los números son incontestables. Líder en Liga y ya en octavos de Champions, donde con un solo punto más pasará como primero de su grupo. La racha es sobresaliente. ¿Qué pasará dentro de cuatro meses? Nadie ni lo sabe y, por eso, Ancelotti prefiere pájaro en mano que ciento volando. Es su arriesgada apuesta y con ella irá hasta el final.

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2021-12-03T08:00:00.0000000Z

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