Justo esta semana se cumplían 62 años desde que Rocío Mohedano, entonces una joven promesa de la canción de Chipiona, se subía a un escenario por primera vez. Y el destino ha querido que se celebre de la mejor manera inaugurando este sábado a las 21 horas el Centro de Interpretación Rocío Jurado –nombre oficial– , aunque popularmente sea el museo de la Jurado. La normativa para adquirir la denominación de museo para el consistorio de Chipiona era inviable por el momento dados los requerimientos técnicos y el gasto que supondría. Por eso han preferido que se quede en la ciudad y ser realistas optando por tomar de momento como referencia el modelo del que se hizo para otro grande, Camarón de la Isla. Será su hija Rocío Carrasco, heredera universal de los derechos artísticos, la encargada de cortar la cinta junto a Luis Mario Aparcero, el alcalde de Unidos por Chipiona, exsocialista, profesor jubilado, chipionero y amigo de la cantante. Para él, esto era más que un reto político, que también, una cuenta pendiente que tenía con la Jurado. «La primera vez que le hablé de hacerlo estando ella en vida no le hizo gracia la idea, porque lo de museo le sonó a mauselo. Y cuando le dije de ponerlo en un edificio que tenía entonces el Ayuntamiento en la avenida Rocío Jurado, me dijo que eso era pequeño para ella. Luego, pasado el tiempo, se fue animando y hasta incluso la escuché comentar el proyecto en algunas entrevistas», explica el alcalde a ABC.

Conocedora de la relación que tanto su madre, Rocío Jurado, como su padre, Pedro

Carrasco, tuvieron con este periódico, su hija nos invita a ser testigos directos de los últimos preparativos antes de la inauguración del museo. «Yo tenía claro que tenía que abrir el museo porque era el deseo de mi madre y ella hubiese querido que fuese aquí, pero también que, tanto el proyecto como la gestión posterior, todo se hiciese de una forma transparente y tal y como marca la ley», re

calca Rocío Carrasco a este medio.

Malversación

No quiere desempolvar el pasado, pero lleva años escuchando que si no lo hacía era porque no quería, pero para aclararlo está el alcalde que explica todas las irregularidades cometidas por parte de la gestión pública con este proyecto. «Aquí ha fallado la mala gestión, yo cuando entro en el Ayuntamiento en 2019 me encuentro un documento publicado en el BOE en el que se le da a Rocío Carrasco un plazo de diez días para que se lleve todo esto de aquí. Pensé que eso era un error, lo hubiese podido montar en Sevilla o en Madrid. La llamé para ver si tenía interés en abrirlo y ella me dejó claro que había que solucionar todo los problemas, principalmente el de Reindus y así lo hemos hecho, lo hemos ido resolviendo poco a poco», asegura Luis Mario.

Y es que donde este sábado se inaugura el Centro de Interpretación Rocío Jurado antes había una cooperativa frutense que se fue a la quiebra y el local pasó a manos del Ayuntamiento en una subasta de la Caja de Ahorros de San Fernando. Luego vinieron los errores públicos que fue solicitar fondos europeos al Ministerio de Industria alegando una finalidad industrial y no cultural. Se llegaron a reunir alrededor de cinco millones y medio de euros con la excusa del museo. En la intervención municipal llevada a cabo se comprobó cómo algunas de las sociedades creadas para tal fin inflaron facturas hasta el punto que tal era el entramado creado que se quedaron 1.700.000 euros por justificar el destino y que, a día de hoy, no se sabe dónde fueron a parar. El consistorio de Chipiona recibió una multa del Gobierno central y tuvo que devolver esa subvención mes a mes con los consiguientes intereses. «El último pago lo he hecho yo en febrero de 2020. Pero la subvenciones no se pedían solo para el museo, también hubo que adecuar la iluminación. Hay unas naves enfrente del recinto que se han convertido en espacio público para exposiciones y eventos culturales. De lo que se gastó para el museo se ha aprovechado todo lo que se podía, muebles, techos… Pero ha habido que informatizar, traer un gas especial para conservar los trajes que estaban en una sala que no reunía todas las condiciones, cambiar la musealización, el sonido… Todo se ha ido aprobando en los plenos porque Rocío no quiere ninguna polémica», explica el alcalde.

De hecho, ya hay quien intenta polemizar con el convenio firmado entre las partes. Pero el documento se ha colgado en el portal de transparencia de la Diputación de Cádiz. «El acuerdo es el mismo, lo único que este ya tiene validez jurídica y el que se hizo antes no. Ella percibirá 150.000 euros por los derechos por cinco años. Lo único es que, durante estos dos últimos años, se ha ido haciendo todo y ella no ha cobrado nada. Entonces hemos decidido que lo vamos a prorratear en tres años en lugar de en cinco. Ni más, ni menos, que no se inventen cosas que no son», argumenta Luis Mario. Ella no ha tenido intención nunca de ganar dinero con esto porque sino hubiese subastado cualquier cosa y hubiese ganado mil veces más: «Ni siquiera se ha planteado la cuestión del ‘merchandising’ que ahí también podría ganar muchísimo dinero. No está en una postura económica egoísta como se dice», recalca el alcalde, que es quien ha tenido que negociar y discutir algunos puntos durante todo este proceso. «Los dos tenemos carácter», ríe. «La publicidad que ha hecho Jurado de Chipiona y el reclamo turístico internacional que a día de hoy sigue siendo eso es impagable», apunta. Se le pone el vello de punta cuando pasamos por delante de uno de los vestidos porque lo llevó una vez que cantó en Chipiona. «Me dedicó una canción… Es como si me estuviese volviendo a coger del brazo. La siento porque ella es imborrable», dice emocionado.

A lo largo del museo uno se va a poder recrear en su música, recordar sus películas, ver los discos de oro y algunos de los innumerables premios que recibió. Se ha reproducido el despacho con sus papeles, sus fotos y hasta se ha llevado el Mercedes en el que siempre viajaba. Y presidiendo una de las salas, su majestuoso piano, tal y como estaba en su casa y afinado porque está previsto que suene y que se vayan sacando más vestidos.

Espacio provisional

Ambos coinciden en que lo que se inaugura hoy es provisional y que ya están trabajando en un espacio nuevo, el teatro Rocío Jurado con parking subterráneo y museo que irá ubicado en la avenida de Regla de Chipiona, pero para eso necesitan unos tres o cuatro años más y que lleguen algunas subvenciones de la Junta de Andalucía. Y es que a diario llegan fans de todo el mundo que necesitan sentirla y hasta ahora cuando venían solo a ver el mausoleo les sabía a poco. Aprovecha la ocasión para recordar que la escultura de la fuente que se inauguró en 1994, y que la pagó la propia artista al escultor Juan de Ávalos y el Ayuntamiento de Chipiona se gastó 14 millones de las antiguas pesetas en urbanizar la zona, algo que hubiesen tenido que hacer de igual forma.

Rostros conocidos

Está previsto que a la inauguración asistan unas 300 personas con acompañante que podrán ver y recordar a la artista en un recorrido que se ha previsto que se haga por grupos. Por parte del Ayuntamiento se ha invitado a todo el equipo de Gobierno, cuentan con la presencia de un consejero de la Junta de Andalucía, y toda la sociedad de Chipiona, que estará representada por los presidentes de las distintas asociaciones. Y Rocio Carrasco estará arropada por familiares, amigos y rostros conocidos llegados de toda España con los que ha querido compartir este momento histórico de la vida de su madre.

Tras la visita, la celebración continuará en la explanada del Centro Cultural donde se podrán degustar algunas de las exquisiteces de la zona que han querido colaborar en el evento como Pedro Mora, el chipionero que más premios ha cosechado en nuestro país como cortador de jamón, las frituras modernas de Caromar y vinos y otros manjares de la zona. Y ya el miércoles próximo serán las distintas asociaciones de mujeres de Chipiona las primeras invitadas por el consistorio en visitar el Centro de Interpretación Rocío Jurado y el jueves quedará abierto al público en general. La entrada costará nueve euros y habrá precio reducido para pensionistas y grupos de más de diez personas. Lo que también promete ser un lugar de peregrinación es el bar-restaurante museo Rocío Jurado que explotará un joven restaurador gaditano. Él también ha querido hacer un homenaje a los chipioneros vistiendo todas las paredes del local de las fotografías que le han ido llevando de sus recuerdos con la artista. Si alguien quiere llevar el suyo, aún está a tiempo porque las paredes son altas. Rocio Jurado vuelve a estar más viva que nunca en su Chipiona querida.