En tiempos en los que el fútbol y sus protagonistas viven una bunquerización extrema que los aleja de la realidad con la que cohabitan, extraña y se agradece la normalidad con la que afrontan la vida personajes tan mediáticos como Marc André Ter Stegen (30 años), el guardián de la portería del Barcelona, que casi no ha variado sus hábitos en la década que lleva viviendo en la Ciudad Condal. El alemán se encuentra en su momento más dulce, con el equipo azulgrana líder gracias a sus actuaciones, que lo sitúan en registros de récord (solo ha encajado seis goles y ha mantenido la portería a cero en 14 de los 18 partidos disputados). Pero sigue con los pies en el suelo, como cuando Zubizarreta, atendiendo a los numerosos informes que le habían llegado a la secretaría técnica, se marchó a Mönchengladbach a ficharlo en 2014. Fue la apuesta del vasco para tratar de frenar el impacto de la marcha de Víctor Valdés.

«No tenía mucha experiencia, no era internacional, no tenía un gran nombre. Pero cuando Jordi Melero, un analista del club, vino de Alemania y me dijo: ‘el Gladbach, que parece que va a bajar, ha puesto a un portero de 18 años que tiene una personalidad…’, iniciamos el proceso», rememora Zubizarreta, que pudo convencer a Stegen tras explicarle su experiencia como portero en un club como el Barça. «Me explicó el estilo, la mentalidad y la cultura del club. Y lo difícil que es. Me dijo que la portería del Barça parece más grande», recuerda el teutón, que hizo las maletas y puso rumbo a la Ciudad Condal. Los 12 millones de euros mejor invertidos del club catalán.

Ter Stegen es el ejemplo de adaptación e integración. Nada más llegar a Barcelona se instaló con su pareja de toda la vida, Daniela Jehle (el meta la llama Dela), en el céntrico barrio de Gracia. Era habitual verlo ir a comprar el pan en patinete eléctrico o desplazarse en metro (lo fotografiaron en la L3, línea que tomaba desde Fontana a Les Corts). En menos de dos años hablaba perfectamente el castellano y chapurreaba el catalán. En el proceso de mimetización también participó su pareja. Daniela se matriculó y licenció en Arquitectura, en la Universidad de Barcelona. Su integración culminó en 2017 con su boda civil en la localidad costera de Sitges (el enlace religioso se ofició en la Toscana), de cuya unión nació dos años después su hijo Ben. Con la intención de instalarse en España cuando el meta se retire (en 2025, cuando acaba contrato, tendrá 33 años) ha invertido en construirse una casa en Castelldefels que ahora está valorada en una cantidad cercana a los 2,5 millones de euros.

Injerto de pelo

Ter Stegen se ha sobrepuesto al bache que atravesó hace justo un año, cuando atravesó los peores momentos físicos y deportivos desde que llegó al Barça. La pesadilla comenzó en el verano de 2020, tras el humillante 2-8 ante el Bayern. Con problemas en el tendón rotuliano de la rodilla derecha decidió pasar por el quirófano, pero sus problemas persistieron un año después, y renunció a la Eurocopa para solventar una dolencia que ponía en riesgo su carrera. El doctor Hayan Alfredson le intervino en Suecia pero en Navidades de ese mismo año, 2021, sumaba 28 goles encajados en 22 partidos y la crítica le señalaba.

Stegen supo sobreponerse, con la misma calma con la que continúa jugando después de encajar un gol. Sigue utilizando de vez en cuando el transporte público para moverse por el centro y disfruta de los museos, exposiciones y restaurantes de la Ciudad Condal junto a Daniela Jehle y su hijo Ben. Costumbres que enamoran al ‘soci’ culé mientras adquiere mayor protagonismo en el vestuario azulgrana. Cercano a Frenkie de Jong y Lewandowski, el meta ha sido escogido recientemente como cuarto capitán en sustitución de Gerard Piqué. Su personalidad quedó patente al plantarle cara a Leo Messi durante un entrenamiento, lo que dañó la relación entre ambos.

Stegen vive días de vino y rosas. Es el portero menos goleado de las cinco grandes Ligas y amenaza el registro de Paco Liaño (Deportivo, 199394) y Jan Oblak (Atlético, 2015-16) que, con un promedio de 0,47, encajaron 18 goles en el campeonato. El germano promedia 0,33. Afronta la segunda parte de la temporada totalmente recuperado de sus problemas en la rodilla y con una imagen renovada tras el injerto capilar al que se ha sometido aprovechando el tiempo de descanso que el c l ub l e di o t ras el Mundial de Qatar.

de récord

Para Xavi, Ter Stegen «es el mejor portero del mundo por la manera en que jugamos». Y lo justifica: «Su salida de balón es perfecta. Lo entiende todo y es una garantía. Estaba criticado aquí porque aquí se critica hasta a las sillas, pero nos da mucha seguridad y ha crecido». Una definición que comparte Miguel Reina. El mítico exportero del Barça y Atlético lo ha explicado a ABC: «Ter Stegen sabe mandar, es muy bueno con los pies, tiene autoridad, es rápido y tiene reflejos. Es un portero completísimo. Para mí está entre los tres mejores del mundo junto a Courtois y Neuer, con permiso de Oblak, que también es muy bueno. Y está arropado por una buena defensa».

A veces viaja en transporte público, visita museos junto a su pareja y se ha construido una casa en la costa para cuando se retire