ASimone Ortega le encantaba el chocolate. Al final de su vida, la familia se lo racionaba por motivos de salud. Cuando murió, su hija encontró varias tabletas en los cajones, entre la ropa. A Patricia Highsmith le descubrieron en 1995, tras su muerte, 56 libretas de espiral entre la ropa de cama en su casa suiza. 18 diarios y 38 cuadernos escritos de 1941 a 1995. Anna Von Planta condensó 8.000 páginas en un volumen que en Anagrama tiene 1.253 páginas hasta el índice. Sobre sus diarios, en 1968 repasó los de 1950: «Está bien llevar un diario, al menos para mí, pues necesito una sensación de continuidad…, ¡pero qué montón de bazofia que una no debería tomarse la molestia de escribir!» . Y también: «No sé quién l legará a leer alguna vez estas líneas, o quién debería molestarse en hacerlo… » (2 de enero de 1968). En todo caso, ni los publicó en vida ni parece que dejara un mandato para hacerlo.

No sé si Jessye Norman, contralto, mezzo, soprano lírica y soprano dramática, habló alguna vez de montón de bazofia refiriéndose a grabaciones que no quiso publicar y que ahora aparecen en el disco ‘Jessye Norman: The Unreleased Masters’. Por ejemplo, una grabación inacabada de ‘Tristán e Isolda’, de Wagner, que Norman rechazó publicar. Según leo a Pablo L. Rodríguez en ‘El País’, James Norman dijo a ‘The New York Times’ que este lanzamiento ayudará a los intereses filantrópicos de su hermana, como la escuela de artes para niños desfavorecidos que lleva su nombre en Augusta. La familia es uno de los inventos más diabólicos de la humanidad.

A la vez, René Fleming, que está viva, lanza también con Decca una recopilación de extractos de óperas grabadas en el MET. Los dos discos están en Spotify (no entiendo este negocio). El de Fleming está compuesto en su mayor parte de emisiones radiofónicas que ha seleccionado ella misma. Un doble cd con Haendel, Charpetier, Verdi, Puccini, Léhar, Tchaikovsky, Rossini, Richard Strauss, Korngold… Hay dúos y tríos con Cecilia Bartoli, Susan Graham, Samuel Rammey y Dmitri Hvorostovsly.

De ‘Las bodas de Fígaro’ son las piezas con Cecilia Bartoli. Supongo que de esa representación de 1998 de la que también hay filmación. Fleming como la Condesa y Bartoli como Susanna. En ‘Cuando los ángeles cantan’, la biografía que Octavio Aceves escribió sobre su amiga Victoria de los Ángeles, él cuenta que en los años 80 lo llamó enloquecida desde París porque había descubierto a Renée Fleming y lo obligó a viajar para ver juntos ‘Las bodas de Fígaro’, donde la Fleming interpretaba a la Condesa, como tantas veces había hecho Victoria. Ahora Fleming tiene 64 años y publica lo que le da la gana. Cosa que no se puede decir de Jessye Norman. Sobre todo, que esté viva para hacer lo que quiera.

Las tabletas de chocolate de Simone Ortega imagino que se las comería la familia en su memoria.