Los aspirantes excluidos del proceso selectivo de conductores de Guaguas Municipales protagonizaron ayer una doble protesta para volver a denunciar públicamente «la falta de transparencia» que aseguran ha marcado el procedimiento.

Así, entre las 9.00 y las 10.30 horas, un grupo de estos opositores que participó en la selección de 175 guagüeros y que no pasó el corte se concentraron a las puertas de las oficinas municipales de León y Castillo con pancartas para exigir «justicia e igualdad en la selección de Guaguas Municipales». Una protesta que repitieron entre las 12.00 y las 13.30 horas ante las sede de la empresa de transporte público, en el polígono industrial del Sebadal.

«Tenemos la prueba de que filtraron los exámenes antes de la fecha del mismo», aseguraba Jonathan Vega, portavoz de este grupo de excluidos de un proceso selectivo que denuncian que ha sido «arbitrario».

Añadió que ha existido «disparidad de criterios» a la hora de evaluarles y señala que «se nos ha dejado fuera por superar el mínimo» que se establecía en «el examen de competencias».

De igual modo, criticaron el modo en que se realizó la revisión de su examen y que en la compañía «se negaron a darnos hojas de reclamaciones y tuvimos que llamar a la Policía», algo que dice pueden atestiguar, pues «tenemos el informe policial».

Además, indicó que acudieron al examen sin conocer el valor de cada prueba «porque no lo ponía en las bases» y que «dos de los integrantes de la comisión de evaluación» también desconocían «los criterios».

Añadió que han consultado a psicólogos que les han señalado que «el examen no atiende a la normativa» pues ha de hacerse con respondiendo a una valoración de «apto o no apto» ,pero «no se puede puntuar».

Críticas de CC-UxGC

El viceportavoz del Grupo Municipal CC-UxGC en el Ayuntamiento, David Suárez, apoyó ayer las protestas de quienes reivindican que «no se ha cumplido con los criterios de baremación y que los mejores se han quedado fuera».

El edil denunció que «los aspirantes demandan respuestas, mientras el concejal de Movilidad, José Eduardo Ramírez, y el alcalde, Augusto Hidalgo, mantienen la cabeza escondida».

Además, criticó que ambos responsables «se escabullan de sus competencias y deriven la responsabilidad al gerente» de la empresa pública de transportes, Miguel Ángel Rodríguez, «cuando es el Ayuntamiento quien debe dar la cara y aclarar qué ha pasado con la baremación de las pruebas y la supuesta filtración de las respuestas».

David Suárez señala que «es el Ayuntamiento quien debe dar la cara y aclarar qué ha pasado con la baremación de la prueba»