urnas. “Esas ganas de cambio y esa alternativa son absolutamente imparables”, declaró Gamarra en una comparecencia sin preguntas en la sede nacional del partido para valorar los resultados. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha convocado este lunes una reunión del comité de dirección y el martes se reunirá la Junta Directiva Nacional del PP, máximo órgano entre congresos.

MAREA AZUL

Tras afirmar que los resultados son “contundentes”, “claros” y “rotundos”, Gamarra indicó que el objetivo que se habían marcado con Feijóo “se ha cumplido” al obtener “más votos” que el PSOE y más alcaldías en las municipales. Según dijo, es una “inmensa marea azul” del PP en toda España que, “lejos de triunfalismos” asumen desde la “más absoluta responsabilidad”. “Hemos entendido perfectamente el mensaje de los españoles y vamos a seguir trabajando y gobernando para todos, también para los que no han confiado en nuestro partido”, manifestó.

La secretaria general del PP remarcó que los datos revelan que en España “hay un enorme deseo de cambio” y añadió que “para ese cambio la alternativa se llama PP”. “No les vamos a fallar y vamos a dar lo mejor de nosotros mismos para que esa España sea una realidad”, ha resaltado.

Por otro lado, El líder de Vox, Santiago Abascal, celebró los resultados obtenidos por su partido en las elecciones municipales y autonómicas de este domingo, que cree que les consolida como “proyecto nacional” e imprescindible para “la alternativa”, aunque ha avisado al Partido Popular de que no espere “regalos” y de que tampoco aceptará “chantajes”.

El PSOE reconoció anoche la derrota sin paliativos este 28M. Así lo admitió la portavoz de la formación, Pilar Alegría, en la sede de Ferraz. “Es un mal resultado, no es el que esperábamos”, dijo, a la par que quiso aprovechar para “felicitar al PP” por sus logros.

“Recogemos el guante, entendemos el mensaje y desde ya nos empezamos a trabajar con más intensidad”, aseguró en una breve comparecencia sin preguntas ante los medios y en la que se ha mostrado visiblemente emocionada. A falta de completar el escrutinio, el resultado para los socialistas es nefasto. Han perdido las comunidades de Aragón, Comunidad Valenciana, Baleares, La Rioja y Extremadura.

A todo ello hay que sumar que el PP les gana como partido más votado en las municipales y que los socialistas también pierden municipios clave como Sevilla o algunos del llamado cinturón rojo de Madrid. No hay prácticamente ningún tipo de lectura positiva en un partido que aspiraba a mantener el poder que había conseguido en 2019. Los socialistas también han perdido ciudades relevantes como Valladolid, Móstoles o Gijón. La sangría se reparte a lo largo y ancho del territorio.

“Aspirábamos a forjar mayorías de progreso gracias a una movilización que finalmente no se ha producido”, afirmó Alegría. “Asumimos que debemos hacer las cosas mejor y esforzarnos más para lograr esa confianza en las próximas elecciones”, añadió. Los socialistas llegaron a la campaña electoral con parte de su electorado desmovilizado. Los esfuerzos para revertir esa situación, con medidas aprobadas en el Consejo de Ministros para colectivos concretos, no han acabado surtiendo efecto y han acabado penalizando al partido en todo el territorio.

Por su parte, Podemos remarcó ayer que el resultado de las elecciones del 28M es malo para la organización, pero también debe hacer “reflexionar” al bloque progresistas. A través de las redes sociales, la líder de la formación y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, admitió que la “derecha y la extrema derecha tienen hoy aún más poder”. “Hemos puesto todo nuestro entusiasmo y nuestra valentía pero nuestros resultados son malos. Ahora toca ponerse a trabajar porque aunque a veces retrocedamos, esta fuerza política va a estar siempre al servicio de la gente”, concluyó.

Podemos vuelve a sufrir la sangría electoral que la formación política viene padeciendo en las últimas citas con las urnas, un retroceso que se ha acentuado particularmente este domingo 28 de mayo con las elecciones autonómicas, con pérdida de casi todo su poder territorial, quedando fuera de Madrid y la Comunidad

Valenciana. Precisamente en estas dos regiones la izquierda alternativa ha acudido a los comicios fragmentada, dado que Podemos e IU han competido electoralmente con Más Madrid y Compromís. En redes sociales, el cofundador

EP de la formación morada y politólogo, Juan Carlos Monedero, manifestó que el “giro electoral” a la derecha en España es “claro”, aunque dé igual “la corrupción”, “carecer de programa”, y “no hablar de los problemas locales”.

“Les basta decir “comunismo”, ETA y España se rompe. O cambiamos los marcos mediáticos y trabajamos por la unidad o viene el desierto. Tiempo de tejer otra vez relatos firmes y reencontrar consensos”, proclamó Juan Carlos Monedero.

En el seno de la formación, el resultado ha supuesto un fuerte golpe y no ocultaban su decepción, dado que los marcos que han pasado en la campaña ha sido la polémica de la compra de votos, hablar de ETA, unido a la falta de políticas ambiciosas sobre el asunto de las hipotecas o el alza de la cesta de la compra.