Una de las huellas que dejó el obispo malagueño en Popayán es la de la Semana Santa. Si vemos las fotos de las procesiones de esta ciudad colombiana, descrubiremos enseguida su parecido con las de Málaga. Los tronos se llevan también a hombros, aunque sus hombres de trono se llaman cargueros, los nazarenos son alumbrantes y el jefe de procesión es el regidor. Quizá su personaje más famoso sea el de la sahumadora, que porta un pebetero de incienso delante del trono. Antiguamente lo ejercía una esclava, pero hoy es un honor que se disputan muchas chicas jóvenes de la ciudad.

La Semana de Santa de Popayán ha sido declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad y es un importante foco de atracción turística. La Agrupación de Cofradías de Málaga está hermanada con la de Popayán desde hace más de cuarenta años.

Les contaré un secreto. La Agrupación de Cofradías estuvo barajando la posibilidad de traer a Málaga uno de los tronos de Popayán para que desfilase en la Procesión Magna que se está organizando con motivo del centenario, algo que la pandemia ha hecho imposible.