Hace dos décadas Manu Tenorio (Sevilla, 1975) saltó a la famia. El cantante, autor y compositor, fue finalista de la primera edición de ‘Operación Triunfo’. Un bombazo televisivo que sacó del anonimato a un joven de entonces 26 años. En este tiempo, aquel trianero de ojos claros y profundas raíces andaluzas ha lanzado al mercado ocho discos de estudio y uno de grandes éxitos.

Manu Tenorio no duda ni un segundo sobre cuál es su verano azul. «Los años de infancia, en familia, son los que recuerdo con más cariño». Especialmente cuando tenía unos 10 u 11 años, en la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda. «Guardo en la memoria con especial afecto cómo después de desayunar, en la emblemática plaza del Cabildo, mi abuelo reservaba un coche de caballos en el que subíamos todos. Y así íbamos hasta la playa», cuenta Tenorio. «Allí pasamos todo el día hasta que, a media tarde, volvíamos a casa».

Días que recuerda como si fuese ayer pese al tiempo pasado. «Mi tío Pedro me compraba siempre cómics, porque en la plaza, por la noche, se realizaba como una pequeña feria del libro», cuenta con ternura. «A mí me encantaban los cómics de ‘La Masa’», precisa el sevillano. «Todas las noches me compraba uno para que, al día siguiente, lo leyera mientras pasábamos el día en la playa».

Una época muy feliz que dejó huella en el artista, que ahora disfruta de los veranos con su mujer, la periodista Silvia Casas, y su hijo, Pedro. Como guinda al momento tan feliz que vive, ha estrenado ‘La nave del olvido’, el primer tema del que será su nuevo álbum, un disco de versiones con el que vuelve la mirada a sus inicios y a las canciones que le calaron en su memoria para hacerlas suyas.