Un año más los vecinos de Astillero y Guarnizo rindieron, con gran asistencia y muy buen ambiente, su homenaje a la patrona del municipio, Nuestra Señora de Muslera. Fue con una misa en la iglesia parroquial del mismo nombre y después con la procesión en la que la imagen estuvo acompañada por el grupo municipal de folclore La Barquía.

Tras ambos actos comenzó en las inmediaciones del templo algo muy esperado por todos los presentes: la tradicional exposición y degustación de los tomates de Guarnizo acompañados, como complementos ideales, por otros productos también deliciosos de la afamada huerta local. Como se precisaba desde el Ayuntamiento de Astillero el objetivo era «reunir a los vecinos de la zona en torno a una actividad meramente familiar que muchos mantienen hoy por tradición y por el mero placer de poder degustar un producto natural». Bastantes tomates (por cierto, de aspecto magnífico y sabor delicioso) procedían de las cinco mil plantas que el propio Consistorio repartiera en mayo con el objetivo de «promover su cultivo y ayudar a conservar el afamado tomate de Guarnizo». «Me gustan estos actos que son populares de verdad. Llevo acudiendo al de los tomates unos cuantos años consecutivos y espero tener salud para poder seguir haciéndolo muchos más. Felicito a todas las personas que los han aportado, a las que colaboran en su preparación para servirlos en los platos, etc. Esta reunión vecinal es muy bonita, algo a conservar y a fomentar al máximo», declaraba Ignacio.

Para Mari Mar «cuanto signifique fomentar una alimentación saludable, como se hace mediante esta degustación popular, es un acierto enorme».