SANTANDER. El verano avanza en la villa pejina y lo hace un año más condicionado por la pandemia de covid. Con una incidencia al alza en toda la región y con el miedo a las diferentes variantes, el municipio afronta su temporada alta, la estival, intentando sacar todo el jugo al turismo existente. La afluencia a los arenales sigue siendo alta por segundo año consecutivo, los visitantes, especialmente este año los propietarios de las segundas residencias, son los que están sosteniendo la actividad comercio y la hostelería, al tiempo que requieren una mayor atención por parte del Ayuntamiento

que vela estos días por prestar unos servicios «a la altura de las necesidades».

Una premisa que tiene muy clara el edil Javier Ramírez, para quien el comercio y la hostelería son «una prioridad». Estamos «muy satisfechos» con que los dueños de las segundas residencias hayan decidido apostar por Laredo para disfrutar el verano y queremos que lo hagan en las mejores condiciones. Para ello, además de los servicios, el equipo de gobierno ya puso a principios de año en marcha una ambiciosa reforma fiscal encaminada a todos los vecinos y propietarios y sigue apoyando al comercio y la hostelería. Así, además de la reducción de la tasa de terrazas y la ampliación del terreno público destinado a cubrir las solicitudes de los hosteleros, se pondrá en marcha a partir de septiembre, una vez decaiga el turismo, un paquete de 450.000 euros en ayudas directas a comerciantes, hosteleros a jóvenes emprendedores... «Se trata de decisiones surgidas y consensuadas con comerciantes y hosteleros con los que existen reuniones periódicas para analizar sus necesidades y tratar de atenderlas en la medida de las posibilidades», aseguró Ramírez.

Rafael Aires, presidente de la Asociación de Empresarios de Laredo, ofrece otra visión. «Si bien es cierto que están llegando a Laredo los propietarios de las segundas viviendas, sus estancias no son prolongadas, limitándose a los fines de semana, lo que está lastrando al comercio, en un verano más retraído que los vividos antes de la pandemia». «La crisis sanitaria está afectando a la oferta actividades, a los festejos y con ello al atractivo de Laredo que se limita a sus arenales y poder disfrutar de las terrazas».

Precisamente este es otro de los puntos en los que incide Aires, en la hostelería y el ocio nocturno, que están padeciendo los cambios constantes en la normativa, los vaivenes del semáforo covid... «Es una locura». «Cambios en las licencias para adaptarse, acondicionamiento de locales y cuando se consigue y se puede abrir llega el nuevo revés en forma de restricciones... Estamos viviendo además como la mayoría de los profesionales, que lo están haciendo bien, está sufriendo las consecuencias de las acciones tomadas por unos pocos y por la falta de un control claro por parte de las autoridades».

Similar opinión a la de Javi Cacho, gerente de El Túnel y el Son de Mar. «Las condiciones atmosféricas lastraron la segunda quincena de junio y la primera de ju

«La pandemia está afectando a la oferta de actividades, al atractivo de Laredo y en consecuencia a los sectores que viven del turismo»