De su madre aprendió caligrafía china y pintura Guo Huo, los trazos con los que ahora ejecuta esos maquillajes de fantasía en los que habitan carpas y dragones con extravagantes ídolos anime, referencias pop y proclamas reivindicativas. Las nociones de maquillaje las encontraría en YouTube, cautivada por los tutoriales de belleza amateurs, aunque pronto empezó a notar la ausencia de referentes que supieran pintar sus ojos rasgados y decidió convertirse en uno de ellos: un canvas en blanco con el que experimentar, inspirar y desafiar las convicciones. "La belleza para mí es singularidad y creo que esa ha sido la lección más importante que aprendí, que la belleza es subjetiva", defiende Kicki Yang Zhang, una polifacética artista de 24 años que iba para piloto

–incluso se presentó al examen–, pero acabó centrada en su faceta artística, encandilando al mundo con su colorista imaginario. Afincada en Berlín, la única ciudad que a esta niña de la Tercera Cultura, de raíces alemanas y asiáticas, le permitió expresarse y sentirse por fin parte de algún sitio, Kicki se ha aliado

Para Kicki el color es la mejor forma de expresar emociones, por eso, la irreverente paleta cromática de los bolsos LB de Bimba Y Lola ha sido su mejor fuente de inspiración.

con Bimba Y Lola para celebrar su aterrizaje en la capital alemana. Una simbiosis creativa en la que el irreverente imaginario de ambas se entremezcla en una especie de performance urbana, con los icónicos bolsos LB de Bimba Y Lola como inspiración. Porque si la historia de la moda está repleta de accesorios con nombre propio, la firma ha logrado convertir los suyos, de tan solo dos iniciales, en una pieza de arte con la que vestirse y experimentar. En este caso, Kicki ha profundizado en su atrevida paleta cromática para elaborar un maquillaje cargado de colores neón y elementos gráficos. "Tuve una fase en la que solo vestía de blanco y negro, hasta que encontré de nuevo mi amor por los colores. Es una forma tan buena de expresar emociones sin palabras", confiesa la artista, que ha plasmado sus obras en el rostro de la nueva escena creativa de la ciudad, como la dj Mariama o la tatuadora Kieu My Vu, que tan bien ha retratado la campaña de Bimba Y Lola. Además, la firma ha lanzado una serie de camisetas de edición limitada con algunas de esas imágenes. Qué mejor souvenir de su primera tienda en el alternativo barrio de Mitte.