En nuestro cole llevamos vinculados a la Campaña Mundial por la Educación desde hace unos ocho años y siempre se ha concebido como una experiencia bastante positiva, tanto para los alumnos como para los profes. Trabajamos los materiales en el marco de la Red Solidaria de Jóvenes de Entreculturas (de la que también formamos parte) y participamos en los actos que se organizan durante la Semana de Acción, de hecho, el año pasado fuimos a Madrid para participar en el acto estatal y fue muy interesante conocer el Congreso de los Diputados. Yo creo que este tipo de actividades ayuda mucho a que los alumnos sean conscientes de la suerte que tienen de poder recibir una educación de calidad, que a veces no lo valoran. Los temas que aborda la CME están vinculados a esto, a concebir la educación como un derecho y a caer en la cuenta de que ahora mismo no todo el mundo puede ir a un colegio ni aprender a leer o a escribir. Y los chicos y chicas se implican bastante, ¡incluso algunas veces sus reflexiones son mucho más profundas de lo que esperas! Como en los materiales suele haber testimonios de niños o de jóvenes como ellos que cuentan su realidad en primera persona ellos se identifican y comprenden mejor el mensaje. Sin duda, merece mucho la pena. Es verdad que empiezan más de los que terminan porque, inevitablemente, a medida que se van haciendo mayores se van interesando por otros temas, pero los que quedan son chicos y chicas muy comprometidos y que sabes que en su vida esto les va a marcar.