ZARAGOZA. Tres mujeres y dos hombres fueron detenidos ayer tarde en el Hospital Clínico de Zaragoza por la Policía Nacional después de agredir a varios miembros del personal sanitario y a agentes, además de causar importantes destrozos en las instalaciones. Según fuentes de la Policía Nacional, los arrestados son la madre y otros cuatro familiares de una bebé recién nacida en el centro hospitalario el pasado sábado 24 de julio. Los detenidos pretendían llevarse a la niña después de que el Gobierno de Aragón decidiera retirar la custodia a sus padres por «causas suficientemente justificadas», según fuentes de la DGA.

Las mujeres detenidas, de 22, 26 y 46 años, y los hombres, de 26 y 55, acudieron a las 15.30 a la unidad de neonatos con el objetivo de llevarse a la recién nacida. Todos ellos mostraron su queja por el hecho de que les hubieran retirado la custodia a sus padres y comenzaron a agredir al personal sanitario (enfermeras y un médico), a una trabajadora social y a varios agentes de la Policía Nacional y la Policía Local que acudieron al lugar.

Según fuentes policiales, una mujer (la más mayor, que podría ser la abuela de la niña) accedió a la zona de la uci donde permanecía la bebé para intentar llevársela con toda su familia.

Testigos presenciales explicaron a HERALDO que las mujeres y los hombres habían roto algunos cristales con los que amenazaron a varios trabajadores por negarse a entregarles a la recién nacida.

Según estas informaciones, los agresores llegaron a coger del cuello a uno de los responsables de la uci y amenazaron a varias enfermeras diciéndoles que se habían quedado con sus caras para cuando se las encontraran en la calle. Varias de las trabajadoras coaccionadas sufrieron un ataque de ansiedad debido a la situación.

Lo ocurrido en la uci llegó a oídos del servicio de Seguridad del Hospital Clínico, que alertó a la Policía Nacional y la Policía Local. Hasta ocho vehículos de ambos cuerpos policiales se desplegaron en el centro hospitalario para detener a los agresores.

Un testigo que vio salir arrestadas a las mujeres detalló que una de ella presentaba manchas de sangre y que, al parecer, se pudo haber cortado al romper el cristal de la unidad de neonatos para amedrentar a los sanitarios. Una segunda detenida apareció diez minutos después esposada por los agentes y visiblemente alterada, profiriendo insultos contra los agentes, rumbo hacia la Jefatura Superior de Policía. Una tercera mujer salió del centro con una bolsa en la que podría llevar la ropa para la recién nacida.

Bajo tutela del IASS

Desde el Departamento de Ciudadanos y Derechos Sociales confirmaron que ayer por la tarde la trabajadora social que se personó en el Clínico iba a proceder a la retirada de la menor para su protección ante el cúmulo de indicios que obligaron a tomar esta medida. Tras el incidente, la recién nacida ha quedado bajo la tutela y protección del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS).

Fuentes de la Policía Nacional señalaron que intentaron frenar la agresión grave que se produjo sobre las 16.15, en la que las víctimas se vieron sorprendidas por esta reacción. Los agentes también recibieron golpes. A última hora de ayer, los cinco detenidos por la Policía Nacional todavía no habían prestado declaración y es previsible que lo hagan hoy para pasar luego a disposición judicial.