HUESCA. Un parapentista alemán salió ayer ileso tras sufrir una accidente provocado por un buitre en Bisaurri. El ave se enredó en las cuerdas del aparato cuando el hombre estaba volando y provocó la caída en barrena del parapente. A 100 metros del suelo, el deportista pudo desplegar el paracaídas de emergencia y aterrizar en la montaña.

El suceso ocurrió hacia las 12.50 en la zona de Pedras Blancas, lugar habitual en la comarca de la Ribagorza para la práctica de este deporte. El parapentista, de 56 años, contrató el servicio de una empresa para que lo transportara hasta la pista desde donde se despega. Se trata de un trazado de varios kilómetros situado a 2.140 metros de altitud.

Poco tiempo después de empezar a volar, el hombre vio que había una bandada de buitres en el aire. Uno de ellos se le enganchó en las cuerdas y provocó la caída del aparato. Afortunadamente, pudo aterrizar.

La presencia de estas aves no es extraña en la zona, debido a la existencia de ganado en la montaña, según indicó el agente de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón que recibió el aviso del 112 para acudir en auxilio del accidentado.

El forestal explicó que al llegar al lugar donde estaba el parapentista, este ya había liberado al buitre, que tampoco había sufrido daños y que estaba dando tirones en los hilos para salir. Tras subir con el material hasta el punto donde estaba el vehículo del APN, el agente llevó al hombre hasta su hotel, en Castejón de Sos. Allí le esperaba su mujer, que, desde la ventana y con unos prismáticos, había visto cómo su marido despegaba y caía poco después.

Según le contó al forestal, el parapentista está de turismo con su familia y unos amigos. Es la primera vez que visita España y también ha sido la primera ocasión en la que se ha topado con un buitre mientras volaba.