«Soy un afortunado: mi devoción es mi profesión»
Técnico nacional e internacional del Granada Club de Fútbol
¿Tito Vilanova…?
Espectacular, Tito. Ese año hablaba mucho con él. Venía de entrenar a Messi en el Barça cadete, y Piqué y a Cesc Fábregas. En el Barça estuve hasta 2012, cuando me marché a entrenar a Azerbayán. Antes, tengo que subrayar que fui director deportivo del Oliver, donde conocí a un ser humano excepcional, como Sergio Pina.
Me acuerdo mucho de él, mucho.
Todos hemos sufrido mucho con su enfermedad de ELA y su fallecimiento. Fue un año maravilloso con él y con su mujer, Miriam Moleón, que le acompañaba a todas partes. Ascendimos a División de Honor Juvenil. Decía siempre que si se quiere, se puede.
No se detuvo en Azerbaiyán.
Para nada. De allí, fui a Eslovenia, a Koper.
Koper, pegadito a Italia…
Y tanto. Por las mañanas, cogía la bicicleta y me iba a desayunar a Italia (sonríe).
Allí, al lado del Adriático. Cómo se lo monta usted...
COMUNICACIÓN
es-es
2021-09-22T07:00:00.0000000Z
2021-09-22T07:00:00.0000000Z
https://lectura.kioskoymas.com/article/282656100595749
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