Kiosko y Más

El ‘día negro’ de las mujeres afganas

Organizaciones femeninas convocan una protesta en Kabul al grito de «trabajo, pan y libertad»

No han podido con nosotras y no podrán, vamos a seguir luchando hasta recuperar la libertad», son palabras de Shahla Arifi, quien tras dos décadas en el Ministerio de la Mujer ahora coordina ‘Mujeres en busca de justicia’. Este grupo de más de 800 integrantes forma parte de un movimiento a nivel nacional de activistas afganas que plantan cara a las restricciones impuestas por el Emirato. El lunes se cumplirá un año de la toma del poder por parte de los islamistas y «como nosotras llamamos a esta jornada el ‘Día negro’, saldremos en una marcha vestidas de negro. No será el 15 de agosto porque sabemos que están muy nerviosos con la fecha, pero en torno al aniversario nos haremos escuchar de nuevo en las calles de Kabul», asegura Arifi bajo su pañuelo a rayas. El eslogan de esta marcha tan simbólica será ‘Trabajo, pan y libertad’.

Tiene 41 años, es madre de cuatro hijos y el activismo le ha costado serias amenazas en estos últimos doce meses. «Me han enviado fotos de uno de mis hijos y de mi marido para decirme que les siguen los pasos y que, o dejo estas actividades, o los matan», cuenta sin poder contener la emoción. Si las cosas no cambian, no descarta emigrar a Irán temporalmente este invierno. De momento lo que hace es cambiar con frecuencia de casa en Kabul y evitar en lo posible los puestos de control talibanes.

Los derechos y libertades que mujer afgana ganó durante dos décadas se han ido esfumando cada día. Pese a estar en plena crisis económica y humanitaria, la mujer es la obsesión para los nuevos dirigentes. Los talibanes insisten en que no son los mismos que en el primer Emirato de finales de los noventa, pero prohíben a las mujeres hacer deporte, no incluyeron a ninguna en su gobierno, cerraron su ministerio y lo cambiaron por el de Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio, les prohibieron la educación secundaria, las mantienen alejadas de los puestos en ministerios y oficinas públicas…

«En el fondo nos temen, por eso toman todas estas medidas y en los próximos meses pueden llegar más. Son peores ahora, no pueden engañar a nadie y ya es hora de que la comunidad internacional mueva ficha porque este país volverá a ser un nido para terroristas», alerta Arifi, quien añora sus 20 años de promoción de deporte entre las niñas como funcionaria del ministerio.

Perseguidas y amenazadas

Entrevistar a mujeres marcadas por los talibanes requiere buscar un lugar seguro en Kabul. «Estamos perseguidas y sabemos que en cualquier momento pueden venir a por nosotras», explica Estorai Yazdanparast, otro de los rostros conocidos entre las activistas de la capital, que ahora divide su vida entre Kabul y su Badakhsan natal, al norte del país.

Lleva trece años relacionada con organizaciones y proyectos

MUNDO

es-es

2022-08-10T07:00:00.0000000Z

2022-08-10T07:00:00.0000000Z

https://lectura.kioskoymas.com/article/282157885021431

ABC