Kiosko y Más

DISEÑAR EL MAÑANA

Braun celebra su centenario con una nueva convocatoria del certamen Braun Prize, un reto dirigido a jóvenes creadores para mejorar el mundo a través del buen diseño

CIEN AÑOS DE CREATIVIDAD

Braun hizo de la funcionalidad un lujo cotidiano. La marca cambió el mundo de la belleza con inventos como la Micron Plus Universal, la primera afeitadora de barba diseñada por Roland Ullmann en 1979. Su pasión por el diseño se aprecia en cada rincón de su fábrica, con piezas icónicas como el Wandalange, el aparato de audio de Dieter Rams, que Virgil Abloh ha actualizado para celebrar el centenario de la firma.

Con una filosofía enraizada en la Bauhaus, Braun revolucionó la industria cosmética con sus icónicas maquinillas eléctricas, gadgets que enfrentaban la cultura de lo desechable basándose en tres principios: eran sencillos, útiles y duraderos. El éxito fue rotundo. Creada por el ingeniero alemán Max Braun, la marca cumple cien años celebrando el buen diseño. Desde su prestigioso Braun Prize, el certamen que desde 1968 promueve el papel de diseño industrial como agente social, reta a jóvenes diseñadores e inventores a hacer lo mismo. Bajo el lema Shape tomorrow (diseña el mañana), la marca ha convocado este año su edición más especial, con un premio de 100.000 dólares al producto que mejore la vida de las personas y del planeta. Las candidaturas, dirigidas a estudiantes y profesionales con menos de cinco años de experiencia, pueden presentarse desde todas partes del mundo, entre julio y agosto, en www.uk.braun.com/en-gb/braunprize. Su objetivo: apoyar el nuevo talento para hacer del mundo un lugar mejor a través de la creatividad.

DAVID BESTUÉ no es historiador, pero su aproximación al monasterio de El Escorial, con toda su severidad y carga esotérica, dice más de nuestro país y sus habitantes que mucho de lo escrito hasta el momento. Bestué –escultor de formación– aborda las vivencias y problemáticas a las que este singular edificio se ha enfrentado desde que fue planeado, en 1560. El libro, El Escorial: Imperio y estómago (Caniche Editorial), arroja una aguda mirada crítica sin renunciar al impacto estético. El artista ya se acercó a esta mole de granito hace cuatro años en Rosi Amor, en el Museo Reina Sofía, donde contraponía tradición y progreso a través de distintos elementos del norte y el sur de Madrid. “En aquella exposición quise centrarme en una visión binaria. El norte era la historia, el granito, la piedra, el poder; y el sur, el contrapuesto, que es como la montaña, la Escuela de Vallecas, la ensoñación, el barro, lo popular”, comenta.

Ahora va más allá y establece un relato a través de información poco conocida sobre la que fuera residencia de Felipe II y tantos otros reyes. Jugando con la humorada y la reflexión, Bestué relaciona hechos con agilidad: El Escorial como símbolo de la colonización americana, como ejemplo arquitectónico de todo aquello que no debería ser una edificación –árido, repulsivo, pesado, apático– y, sobre todo, como continuación de unos valores –catolicismo, ejército, monarquía– en cuestión. Bestué recuerda que el palacio fue saqueado por los franceses, quemado en innumerables ocasiones, redecorado y ocupado por el pueblo, que transformó uno de sus patios en redil de ovejas. “Nuestra generación [nació en 1980] debe rendir cuentas de todo este aparataje simbólico que nos envuelve”, insiste.

El mundo ha cambiado de manera violenta, sin transición, y es el momento de repensarlo y rediseñarlo. Más que nunca, es el momento de que el diseño ponga en valor las emociones. Y de que los lugares donde se gestan sus nuevos talentos se conviertan en verdaderos agentes del cambio. El Istituto Europeo di Design (IED) forma a esa élite capaz de cambiar el planeta a través de sus acciones reforzando su arma más potente: la creatividad. Su nueva campaña, The World Needs to Be Redesigned Now, es una llamada a la fuerza del diseño como motor de transformación. Algo que la sociedad y las empresas reclaman hoy más que nunca.

Con sedes en Madrid, Barcelona y Bilbao, IED es una institución de referencia nacional e internacional en el human-centered design, es decir, el diseño para las personas. Su oferta formativa en títulos de grado en enseñanzas artísticas superiores de diseño, másteres y posgrados se vertebra en torno a la innovación, la tecnología humanizada, la empresa, la inclusividad, la sostenibilidad y la investigación, así como el desarrollo de proyectos reales con empresas punteras y la guía de un cuerpo docente integrado por profesionales de prestigio.

Sus programas, en inglés y español, abarcan los ámbitos del diseño, la moda, la comunicación visual o el management & design strategies y están dirigidos tanto a diseñadores que quieren especializarse o actualizar conocimientos en algún ámbito específico, como a profesionales que desean integrar el pensamiento del diseño en su perfil profesional o aplicarlo a su sector/proyecto como eje vertebrador de la innovación. La apuesta del IED se sustenta en un modelo educativo innovador que hace uso de metodologías y herramientas específicas, como la creación en equipo, los procesos de trabajo ágiles, la investigación de los usuarios y el análisis de los entornos.

El IED nació en 1966 en Milán. Desde que aterrizara en España en 1994, de sus aulas han salido más de 40.000 estudiantes de todo el mundo preparados en los conocimientos técnicos y las soft skills necesarias, como creatividad o pensamiento crítico, para abrirse paso en un mundo profesional competitivo y en constante evolución. El mundo necesita ser rediseñado hoy. Es momento de actuar y hacemos una llamada a la acción. ¿Te unes?

RECIBIDOR

es-es

2021-05-29T07:00:00.0000000Z

2021-05-29T07:00:00.0000000Z

https://lectura.kioskoymas.com/article/281870121356085

Prisa