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Otero de Sanabria, ya con estación de AVE, se queda sin escuela y sin el viejo consistorio, que se demolerán

El Ayuntamiento de Palacios de Sanabria prevé demoler tres edificios municipales que utilizaban para reunirse los vecinos del anejo

Araceli Saavedra

Vecinos y veraneantes de Otero de Sanabria han ganado una estación de Alta Velocidad provincial pero pierden sus inmuebles históricos de uso vecinal. Los edificios de la escuela, el Ayuntamiento viejo y la casa de los pobres de Otero de Sanabria tienen los días contados.

A partir del mes de agosto está prevista la demolición de los dos edificios emblemáticos de arquitectura tradicional. Las asociaciones y entidades culturales con sede en el edificio de las antiguas escuelas temen que el Ayuntamiento de Palacios no reponga unas instalaciones para los usos que se destinan actualmente, ya que no hay un compromiso por escrito, solo verbal.

“A los jóvenes no hay legado que dar”. Es la afirmación de una vecina nonagenaria ha planteado ante el derribo de los edificios emblemáticos. Los expertos estiman que con una inversión de 40.000 euros se hubiera reparado el lienzo de la pared las escuelas y la casa del maestro. Las piedras caídas eran el relleno de uno de los balcones para convertirlo en ventana además del picado del revoco de cemento que se aplicó para cubrir la piedra de la construcción.

La sala social y la biblioteca, en el primer y segundo piso, están en buen estado, aunque el informe del arquitecto no para la función que tiene actualmente. Asociaciones y vecinos consideran que con una pequeña inversión las escuelas, el patrimonio histórico, es salvable. El Coto de Caza hizo a comienzo del siglo, una importante donación –unos 6.000 euros- para reparar el tejado, además de que los vecinos han contribuido a reformar el interior.

El edificio del Ayuntamiento presenta más deterioro, aunque históricamente es el inmueble de más valor por ser la sede del desaparecido Ayuntamiento de Otero de Sanabria, con un almacén en la parte baja y la casa de los pobres, donde se ofrecía un plato de comida a peregrinos o personas necesitadas. Como curiosidad señalar que el salón de plenos, ubicado en la segunda planta, disponía de una chimenea y hasta una cocina para las sesiones en invierno. Hay alguna dependencia más cuyo uso se desconoce, aunque bien pudiera ser archivo o despacho.

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2021-07-27T07:00:00.0000000Z

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