Independientemente del palo que hayamos decidido utilizar, es bueno seguir una rutina previa para este tipo de golpe, ya que va a ser la misma independientemente del palo que usemos. En primer lugar, cogeremos el más corto de lo habitual (02). Colocaremos la bola al pie derecho (04). Cuando practiquemos podemos guiarnos con un palo como se muestra en la imagen 03. Por último concentraremos la mayor parte de nuestro peso en el pie izquierdo para favorecer el toque de bola-suelo.