España ha situado 30 empresas en el ranking de las 1.000 ‘startups’ tecnológicas más importantes de Europa elaborado por la consultora especializada McKinsey. Y aunque solo representa el 3% del total de estas compañías, se coloca en séptima posición por detrás de Reino Unido, Alemania, Francia, Suecia, Suiza y Países Bajos.

Para elaborar esta clasificación se han tenido en cuenta a las empresas emergentes fundadas después del año 2000 en 33 países europeos, incluidas algunas tan conocidas como Spotify, Adyen y BioNTech. Las ‘startups’ de origen británico encabezan esta clasificación con 319, es decir, un 32% del total. Añadidas las firmas de Alemania y Francia, aglutinan casi dos tercios de las 1.000 primeras.

El valor medio de ese millar de esas compañías europeas es de 890 millones de euros, una cifra «bastante superior» a la tasación de las empresas españolas incluidas en el ranking, con un promedio de 513 millones, esto es, un 42% menos, informa Europa

Press. En su conjunto, perciben una financiación que asciende a 140.000 millones de euros, aunque de nuevo en el caso español la cifra es «notablemente menor», con 117 millones por sociedad frente a los 164 millones de media europea.

Sin embargo, el informe muestra que el promedio de personas empleadas en las ‘startups’ españolas es un 12% superior al registrado en las europeas en general. En cuanto al tipo de campos en los que se mueven, van desde inteligencia artificial (IA) hasta ‘software’ B2B como servicio (SaaS), pasando por biotecnología y salud, comercio electrónico y consumo, ‘fintech hardware’, ‘marketplace’, medios de comunicación y contenidos, y también movilidad eficiente.

Las empresas han sido evaluadas teniendo en cuenta su posición en diferentes variables para alcanzar el estatus de unicornio (una valoración de más de 1.000 millones de dólares): el modelo de negocio, las macrotendencias de ‘tailwind’, el crecimiento, la internacionalización, la rapidez de expansión, la densidad en I+D, la oferta, la arquitectura tecnológica, la escalabilidad de las operaciones, la creación de valor, el equipo fundador, los recursos humanos, la cultura, la financiación y la estrategia de salida.

Un 24% de las principales empresas emergentes en Europa pertenecen a la industria de la biotecnología y la sanidad. En el caso español, el 29% de las ‘startups’ actúan en la industria de ‘marketplace’, es decir, están destinadas a la construcción de plataformas multilaterales que conecten la oferta y la demanda de productos o servicios.