Con lo carísimo que se ha puesto todo, hay que buscar los chollos» estas eran las palabras de Carlos uno de los centenares de clientes que ha tenido este sábado la tienda Crazy Day Factory de Sevilla, un nuevo modelo de negocio que vende las devoluciones que los clientes hacen a grandes plataformas de venta como Amazon y Shein a precio de saldo. Sólo hay media docena de establecimientos en toda España y uno está en la ciudad, en concreto en el Polígono Carretera Amarilla.

Rodrigo es el gerente y explica que abrió el pasado 27 de octubre y apenas hizo publicidad, pero la acogida fue increíble: «Había tantas personas que no pude contarlas». Comenta que en los expositores tienen «productos que los clientes han devuelto a través de estas plataformas porque tienen un fallo o no les sirven». Todo ese género lo compran estos establecimientos para que tengan una segunda oportunidad. La idea ha sido importada de Madrid, concretamente, de Parla y Vallecas, donde dieron antes el pistoletazo de salida hacia compras más asequibles para unos bolsillos debilitados por la inflación. Para ello hacen un aumento progresivo de los descuentos a lo largo de la semana: El viernes se renueva el género y se fija el precio de los artículos en unos 20 euros, luego se aplica una rebaja al día siguiente hasta los 15 y así hasta el jueves, cuando todo se pone a un euro.