El Consejo de Ministros ha aprobado de nuevo la Ley de Representación Paritaria, que obligará a que haya una presencia de al menos un 40% de mujeres en el Gobierno, los consejos de administración de las grandes empresas, las candidaturas electorales y los órganos constitucionales. La norma, que actualiza otra de 2007, se había aprobado ya en segunda vuelta y remitido al Congreso en la pasada legislatura, pero decayó por la convocatoria de elecciones generales.

“La meritocracia sin paridad no es posible”, dijo ayer la ministra de Igualdad, la socialista Ana Redondo, que se estrena así en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la defensa de una norma que en el pasado defendió la vicepresidenta Nadia Calviño, en lugar de la entonces ministra de Igualdad, Irene Montero. Alegría ha atribuido este cambio a la modificación de “competencias” en los ministerios en la nueva legislatura, al asumir Presidencia también el área de Justicia.

Así, Redondo destacó que la norma es “motivo de esperanza” y recalcó que se trata de una ley “justa, eficiente y ambiciosa”. También recordó que la aprobación de esta ley tiene lugar “en un momento especialmente duro, especialmente oscuro”, tras los últimos asesinatos machistas, con cinco mujeres y una niña fallecidas en una semana.

“Creo que esta ley es un motivo de esperanza, es una luz en medio del túnel y, desde luego, también pretende remover ese machismo estructural, ese problema enorme que tiene la sociedad española, como es el machismo estructural. A través de leyes como esta, a través de las leyes de paridad, también removemos esas realidades tan acendradas y tan secularmente instauradas en nuestra sociedad”, subrayó.

Además, recalcó “el firme compromiso del Gobierno de España con la igualdad real de

oportunidades” y calificó la ley de “justa, eficiente y ambiciosa”.

“Es una declaración de intenciones. Con este proyecto también declaramos lo que pretendemos y queremos que sea esta legislatura, este mandato. Un mandato en el que vamos a profundizar en derechos y libertades para todas y todos, en que vamos a agrandar la democracia española y en definitiva en el que vamos a seguir profundizando en todas las cuestiones que tengan que ver con la igualdad real y efectiva de hombres y mujeres”, afirmó. Asimismo, indicó que se trata de un proyecto “transversal”, en el que han participado “muchos ministerios”, tanto en la decimocuarta como en la decimoquinta legislatura. En concreto, explicó que han intervenido el Ministerio de Interior, el Ministerio de Presidencia y Justicia, el Ministerio de Economía, el Ministerio de Hacienda y el Ministerio de Igualdad.

Y el Gobierno da por válidos los dictámenes emitidos por los órganos consultivos al texto aprobado en la pasada legislatura, ya que Redondo ha asegurado que la norma cuenta con el visto bueno y el informe favorable preceptivo del Consejo de Estado, del Tribunal de Cuentas y también de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, que “garantizan que es técnicamente un proyecto solvente”. Redondo también trasladó el compromiso del

LA MEDIDA TAMBIÉN AFECTARÁ A LAS CANDIDATURAS ELECTORALES Y A LOS ÓRGANOS CONSTITUCIONALES, ENTRE OTROS

Gobierno con la igualdad y ha destacado que este tema “no es baladí” para el Ejecutivo, sino “nuclear”, “central”.

“Vamos a ir con todo con esta ley”, precisó para añadir que “se trata de que las mujeres que tienen mérito y capacidad sobrados puedan llegar en igualdad de condiciones que los hombres a esos puestos de responsabilidad y en definitiva se trata de avanzar de forma real en la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres”.

En el ámbito empresarial, la ministra Redondo no prevé resistencias a la norma porque defiende la “eficiencia económica”, por lo que, a su juicio, cualquier Consejo de Administración “abrazará” estás medidas, que “van a avanzar en la dirección que quieren las empresas, que es en la de mejorar sus resultados y sus capacidades económicas”.