El espectacular look rojo fuego de una elegantísima Charlene y la inesperada ausencia de Dimitri Rassam, el marido de Carlota Casiraghi, fueron dos de los temas más comentados en el principado durante la celebración del Día Nacional de Mónaco. Pero sin duda, los que lograron acaparar más miradas y convertirse en los grandes protagonistas de la jornada fueron los más pequeños de los Grimaldi.

PRIMEROS TACONES

No faltó ninguno. Los mellizos Jacques y Gabriella, él con un uniforme hecho a medida de la unidad militar que trabaja en el palacio, y ella con un tocado como mamá y luciendo sus primeros tacones, posaron al lado de Charlene,

La alegría de los pequeños contrastó con la seriedad de Charlene y Carolina

La sombra de la mala relación que existe entre las cuñadas planeó también en las celebraciones del gran día del principado

Los niños se divirtieron ondeando la bandera de Mónaco al ritmo de la banda de música

que estuvo muy pendiente de ellos. Tras la tradicional misa en la catedral, en el balcón de palacio los hijos de Alberto y Charlene compartían protagonismo con otros ‘pequeños príncipes’, los hijos de sus primos. Carlota Casiraghi, muy elegante, fiel a Chanel, posaba orgullosa con Raphaël (9) y con el pequeño Balthazar que acaba de cumplir 5 años.

TODOS CON TRAJE

Los monegascos disfrutaron también con la espontaneidad de los tres hijos de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo y de los de Pierre y su esposa, Beatrice Borromeo. Los siete primos, los niños con traje y corbata y la pequeña India con abriguito, comentaban desde el balcón cada detalle de la celebración y se divirtieron ondeando la bandera del principado al ritmo de la banda de música .